Hoy estrenamos una nueva sección dedicada a la arquitectura más valiente. La que busca resolver los retos que plantea combinar confort y sostenibilidad, pero lo hace desde una perspectiva totalmente inesperada. Son soluciones que pueden parecer de locos. Pero muchas veces son los que se atreven a pensar distinto los que nos hacen descubrir nuevos caminos hacia un futuro mejor para todos.
Y este primer artículo lo dedicamos a una casa residencial que según el propio arquitecto mexicano “Nace de la idea de crear un espacio adaptado al hombre, de acuerdo a sus necesidades ambientales, físicas y psicológicas”.
En esta vivienda que parece inspirada en un cacahuete, el jardín cubre toda la casa. Regulando la humedad ambiental y aislándola del calor y del frío. Y lo hace con una eficacia increíble, ya que el interior se mantiene entre los 18º y los 23º durante todo el año. Los muebles emergen de la pared con una naturalidad asombrosa y la luz parece tener una cierta fijación por entrar hasta lo más profundo. Pero, claro, eso no es casualidad, es el fruto del talento y del trabajo minucioso de Javier Seniosiain.