Cuando los días empiezan a acortarse y el aire se vuelve más fresco, todos pensamos en mantas, sopas calientes… y en el confort del calor de casa. Pero no hay nada más frustrante que abrir la puerta y descubrir que ese calor del hogar brilla por su ausencia. Y si la calefacción no funciona como debiera, es probablemente, porque no hemos hecho los deberes: una simple revisión antes del invierno puede evitarnos ese disgusto. Y …
